La eurodiputada de Ciudadanos insta a «los únicos que han defendido esta técnica tan agresiva, el PP, a unirse al movimiento de la lucha contra el fracking»
Bruselas, jueves 26 de mayo de 2016. La diputada de Ciudadanos (C’s) en el Parlamento Europeo, Carolina Punset, ha defendido que «la política energética de Europa ha de ser coherente y no permitir la importación de gas extraído mediante fracking, ya que esta técnica está prohibida en la mayoría de los países europeos por ser muy agresiva». Para Punset, que ha intervenido en una sesión sobre el gas natural licuado organizada por la Comisión de Industria y Energía, es fundamental «no fomentar el fracking importando el gas de países donde se produce» porque «resultaría incoherente con la lucha contra el cambio climático». Esta técnica, según ha explicado, es «absolutamente agresiva con el medio ambiente y el metano que emite es entre 30 y 60 veces más perjudicial que las emisiones de CO2».
Al respecto, la eurodiputada ha señalado que «se prevé una importación masiva de gas natural como fuente de energía para sustituir al carbón y al petróleo y como complemento a las energías renovables» y ha subrayado que «este gas se importará principalmente de Estados Unidos, país que emplea la técnica del fracking. Tanto es así que el Gobierno francés está estudiando cómo prohibir la importación de gas extraído mediante esta técnica tan agresiva y limitar la importación de gas natural al convencional», ha asegurado Carolina Punset, al tiempo que ha expresado «sus dudas respecto a que el PP español siga el ejemplo de Francia y se sume al movimiento de lucha contra el fracking».
«En materia ambiental, en España tenemos malos precedentes y muy poca concienciación ciudadana. Es muy importante movilizar a la opinión pública de la importancia de rechazar esta técnica», ha señalado. En esta línea, Punset ha defendido que «la transición hacia las energías renovables no solo es inevitable y necesaria desde el punto de vista medioambiental, sino que es también una oportunidad de negocio que no puede desaprovecharse, puesto que puede suponer una de las principales fuentes de creación de empleo y de crecimiento económico».