- La eurodiputada Soraya Rodríguez advierte, junto a una veintena de eurodiputados, del desafío para la salud mental que es la pandemia y las consecuencias a largo plazo, también para los sistemas sanitarios
La eurodiputada de Ciudadanos y portavoz en materia de Salud en el Parlamento Europeo, Soraya Rodríguez, ha movilizado a una veintena de eurodiputados de Renew Europe para instar a la Comisión Europea a aprobar con urgencia una Estrategia integral de salud mental, ante los graves problemas provocados por la pandemia y las consecuencias a medio y largo plazo que van a acarrear, también para los sistemas sanitarios.
Soraya Rodríguez encabeza una pregunta al ejecutivo comunitario que firman 24 eurodiputados del grupo liberal, del que forma parte la delegación de Ciudadanos en Bruselas, que respalda también esta iniciativa. La portavoz sanitaria ha interpelado a la Comisión en muchas ocasiones sobre este asunto y ha impulsado distintas iniciativas para que la salud mental ocupe un lugar en la agenda política europea, porque puede convertirse en una segunda pandemia.
En esta ocasión, junto a los colegas de Renew, Rodríguez pregunta al ejecutivo europeo cuándo presentará un informe integral y a largo plazo para una Estrategia europea en esta materia y qué piensa hacer para minimizar las disparidades que existen entre países en el acceso a tratamientos y servicios de salud mental.
Además, la eurodiputada subraya otro aspecto clave en salud mental, la prevención, por lo que pregunta a la Comisión sus planes al respecto, cómo va a favorecer el bienestar mental de los europeos que evite estas enfermedades.
“Antes de la pandemia, más de 84 millones de personas en la UE se veían afectadas por problemas de salud mental, una cifra que sin duda ha aumentado desde entonces. La pandemia de COVID-19 y la subsiguiente crisis económica han causado una enorme carga en el bienestar mental de las personas, que sufren más estrés, ansiedad y depresión”, afirma Soraya Rodríguez.
Recalca también que las personas con discapacidad psicosocial, mujeres, jóvenes y personas con ingresos más bajos, entre otros, se han visto afectados de manera especial. El desafío es enorme y requiere medidas urgentes, porque tendrá además consecuencias en los sistemas sanitarios, algunos de ellos ya con problemas. Es el caso de España, donde la atención pública en salud mental cuenta ya con pocos recursos.
A los problemas de salud se suma el coste económico de estas enfermedades, calculado en unos 600.000 millones de euros antes de la pandemia, otro argumento para reclamar a la UE una estrategia europea.