• Maite Pagazaurtundua y Sara Giménez advierten de casos de trato discriminatorio a gitanos, sirios y afganos en las fronteras, cuando todos huyen de la misma guerra
Maite Pagazaurtundua y Sara Giménez, eurodiputada y diputada de Ciudadanos, se han dirigido juntas a la Agencia Europea de Derechos Fundamentales para pedirle que vigile el respeto a los valores fundamentales de la UE en la acogida a todas las personas que huyen de Ucrania, ya que algunos refugiados que son gitanos o de origen sirio y afgano denuncian que han recibido un trato discriminatorio o vejatorio en las fronteras.

 

“La oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados ha advertido de que no es algo generalizado, sino que se han producido casos aislados, pero tenemos que ser cuidadosos en todo este proceso que, en medio de la improvisación, el estrés y el miedo, puede resultar peligroso para los desplazados”, aseguran las dos parlamentarias en una carta al director de la citada Agencia, Michael O’Flaherty.

 

Pagaza es vicepresidenta de la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo y Sara Giménez, diputada en el Congreso y presidenta de la Fundación Secretariado Gitano.

 

La eurodiputada de Cs ha afirmado que “la invasión rusa está provocando un éxodo masivo que conlleva un sufrimiento horrible para millones de personas, situaciones terribles que pueden agravarse si se dan situaciones de discriminación por razones de raza, discapacidad u otros”. “Tenemos que estar especialmente atentos para que el viaje y reubicación de los desplazados se haga cumpliendo los criterios básicos de los derechos fundamentales”, agregó.

 

Esta iniciativa coincide con el Día Internacional contra el Racismo que se celebra hoy, como ha recordado Sara Giménez. “Lamentablemente, hemos tenido conocimiento de trato discriminatorio con la población romaní de Ucrania, cosa lamentable que hay que rectificar. Esperamos la mayor solidaridad en la acogida sin distinción alguna, trato igualitario para todos los que sufren la invasión en Ucrania, que no haya diferencias en el acceso a la ayuda humanitaria o a la condición de refugiado”, ha exigido.

 

Ambas parlamentarias reconocen en su carta la altura de miras sin precedentes y la solidaridad que están demostrando los europeos ante la llegada de 3 millones de personas: 1,8 millones de refugiados han ido a Polonia, unos 453.000 a Rumania, 337.000 a Moldavia, 263.000 a Hungría y 213.000 a Eslovaquia, mientras que Rusia ha recibido alrededor de 143.000 refugiados.

 

Sin embargo, distintas fuentes aseguran que hay falta organización en los registros y hay testimonios de refugiados acerca de un trato discriminatorio o vejatorio, cuando no debe haber distinción entre las personas que huyen de la misma situación de guerra.

 

“Por ejemplo, estudiantes africanos o indios que se encontraban realizando su formación en Ucrania, indican este hecho. Al igual que se han reportado algunos casos de trato discriminatorio hacia personas gitanas, ya sea en obstáculos para poder atravesar las fronteras de países limítrofes como el trato que reciben una vez que han logrado atravesar las fronteras”, explican las dos parlamentarias. A estos casos se añaden los de personas que llegaron a Ucrania como país de refugio procedentes de Siria o Afganistán, donde tuvieron que abandonar sus hogares y sus vidas.

 

“¿Cómo piensa la Agencia Europea de Derechos Fundamentales hacer respetar los valores fundacionales de la Unión Europea, que se basan en el respeto, la tolerancia y la no discriminación por razón de origen, color de piel, etnia, religión, sexo, identidad de género, orientación sexual, discapacidad o cualquier otra característica en la presente situación bélica?”, plantean Pagaza y Giménez a Michael O’Flaherty.