- En respuesta al eurodiputado de CS Jordi Cañas, Bruselas asegura que evalúa las medidas que van tomando los Estados contra la inflación porque tienen que ser “compatibles” con el mercado común
La Comisión Europea ha asegurado que las medidas de control de precios, como imponer límites a lo que cuestan determinados productos de la cesta de la compra, pueden interferir “en el funcionamiento del mercado único, en detrimento de los consumidores y de los agricultores”, un aviso ante las pretensiones de la ministra Ione Belarra.
El Ejecutivo comunitario se muestra claro en una respuesta al eurodiputado de CS Jordi Cañas, portavoz de Comercio Interior en el Parlamento Europeo. Cañas preguntó en enero al Ejecutivo comunitario por las amenazas de la responsable de Derechos Sociales y Agenda 2030 a varias cadenas de alimentación ante la fuerte inflación, unas declaraciones lamentables en sí mismas con la gravedad añadida de que procedían de un miembro del Gobierno, denunció el eurodiputado.
“¿Considera la Comisión esta solución como la ‘más efectiva y más barata’, tal y como afirma la ministra?”, preguntó Jordi Cañas. En su respuesta, la CE explica que no suele hacer comentarios sobre declaraciones políticas, pero deja claro que imponer topes a los precios puede alterar el mercado único y este es “el principal activo de la UE para la recuperación y la resiliencia de su economía”.
“La Comisión presta una atención continua a las medidas adoptadas por los Estados miembros y evalúa su compatibilidad con las libertades del mercado único. Es probable que las medidas de control de precios interfieran en el funcionamiento del mercado único en detrimento de los consumidores europeos y también de los agricultores”, asegura.
Jordi Cañas ha reiterado sus críticas a la ministra Belarra por amenazar a las cadenas de distribución con propuestas que “vulneran la política de libre competencia del mercado único”. “El Gobierno debería haberse dado cuenta a estas alturas ya de que amenazar a las empresas no es el camino en general, pero desde luego no lo es para que arrimen el hombro ni para ayudar a los consumidores, que son los paganos finales de la situación”, ha añadido el eurodiputado.
La Comisión Europea añade en su respuesta a Jordi Cañas que está “al corriente de la situación del mercado minorista de alimentos en España y de las medidas adoptadas por las autoridades españolas para tratar de hacer frente a la inflación en este ámbito”. Entre los instrumentos que se pueden aplicar aceptados por Bruselas, recuerda, está la bajada del IVA a determinados alimentos esenciales o el establecimiento de bonos en apoyo a los hogares más vulnerables.