El eurodiputado de Ciudadanos Jordi Cañas ha exigido a la Comisión Europea que equilibre la competencia entre el tomate español y el marroquí porque mientas retroceden las exportaciones de uno crecen las del otro y ha apuntado a las ventajas derivadas del Acuerdo de Asociación UE-Marruecos.
Como portavoz de Comercio Internacional y de Mercado Interior en el Parlamento Europeo, Jordi Cañas ha registrado una pregunta a la Comisión Europea en la que explica que en el citado Acuerdo no se pide a los productores de fuera de la UE el uso de fitosanitarios.
“Se crea así una desventaja competitiva para el producto europeo, que se suma al hecho de que los costes de producción en Marruecos son la mitad que los europeos”, ha explicado el eurodiputado liberal.
Desde la entrada en vigor del citado Acuerdo de Asociación, en 2013, Marruecos ha pasado de exportar 366.000 toneladas de tomates a Europa a 557.000 y ha incrementado sus ventas en el Reino Unido de 40.000 a 144.000 toneladas. ”En el mismo periodo, las exportaciones españolas de tomate a Reino Unido han caído de 143.182 toneladas a 70.780”, apunta Jordi Cañas.
Marruecos se ha convertido en el principal proveedor extracomunitario de tomate y representa el 70% de las importaciones de tomate de países terceros. Su crecimiento ha sido constante, con un aumento del 52% en el volumen de exportaciones de tomate.
Ante esta situación, Jordi Cañas ha planteado la siguiente pregunta al ejecutivo comunitario: “¿Está tomando la Comisión medidas para modificar el acuerdo de Asociación entre la UE y Marruecos y garantizar que los productos importados cumplan con las mismas condiciones de cultivo que se aplican a las producciones comunitarias?”.