- Soraya Rodríguez reúne en Madrid a representantes de organizaciones de activistas por los derechos humanos en Cuba en el aniversario de las protestas pacíficas en favor de la democracia en la isla
La eurodiputada de Ciudadanos y coordinadora de Derechos Humanos de Renew Europe, Soraya Rodríguez, ha reclamado la liberación de los más de 1.500 presos políticos detenidos por el régimen castrista por su participación en las protestas del 11-J, en un evento que ha impulsado en Madrid cuando se cumple un año de las manifestaciones pacíficas en la isla.
“El 11-J fue un momento de inflexión en Cuba. Por primera vez, como señaláis quienes participasteis en las protestas, el pueblo cubano gritó ‘Libertad’ en libertad”, ha exclamado Rodríguez. La eurodiputada ha reunido a miembros del Observatorio Cubano de los Derechos Humanos así como a activistas del Movimiento San Isidro para reflexionar sobre la situación en el país un año después de las revueltas contra la dictadura de Miguel Díaz-Canel. “El Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación con Cuba tiene que ser una herramienta de presión que obligue al régimen cubano a comprometerse con lo firmado. Reforzar el diálogo de derechos humanos e incluir a la sociedad civil independiente es un elemento fundamental”.
La eurodiputada ha puesto en valor el papel de la comunidad internacional para forzar al régimen a cumplir con sus compromisos de Derechos Humanos. Rodríguez ha incidido en la importancia de no romper el acuerdo de cooperación entre la UE y Cuba, “nuestra herramienta de acción en la isla”, para forzar al régimen a preservar las libertades civiles y el Estado de Derecho. En este sentido, ha anunciado que ha presentado una pregunta a la Comisión para exigir la liberación del activista José Daniel Ferrer, en aislamiento sin contacto con su familia desde hace un mes.
“El aumento de la represión en la isla muestra la debilidad del régimen. Tienen miedo”, ha remarcado Rodríguez. La eurodiputada ha subrayado que el Parlamento Europeo seguirá teniendo a Cuba muy presente, “porque las dictaduras no tienen ideología, solo imposición, aunque el régimen cubano trabajara mucho ese relato ante la comunidad internacional”. “Nuestra obligación es estar al lado de la sociedad cubana, la que está dentro y la que está fuera. Y ahí estaremos”, ha concluido.
Representantes de la oposición pacífica de Cuba
El acto ha estado moderado por Yanelys Núñez, del Movimiento San Isidro, quien ha reivindicado el papel de las madres que se han convertido en activistas para proteger la vida de sus hijos, muchos de ellos detenidos y represaliados por participar en las movilizaciones del año pasado.
“El 11-J borró esa imagen en la comunidad internacional de que la sociedad cubana estaba adormecida por el régimen. Sí, el 11 de Julio trajo condenas, pero también logró unir a muchas familias por la democracia”, ha subrayado.
Elena Larrinaga y Daily Coro, miembros del Observatorio Cubano de Derechos Humanos, han incidido en que las revueltas “solo muestran una realidad que el Observatorio lleva años denunciando”, y ha alegado que la situación no ha hecho más que empeorar. “Hoy tenemos cerca de mil presos políticos todavía en las cárceles. Entre ellos personas con diversidad funcional, discapacidad física, una mujer embarazada, niños con cardiopatías”.
Daily Coro, médico de profesión, ha advertido de la estrategia de propaganda del régimen cubano para fomentar entre la comunidad internacional la idea de que la sanidad y la educación en Cuba son de calidad. Larrinaga, no obstante, ha querido mandar un mensaje de esperanza: “El Gobierno cubano ha cometido un error grandísimo: cuando mandaron aquí a los presos, el Gobierno pensó que los cubanos del exilio y los de ahora no se iban a entender, pero las sinergias fueron totales. No nos vamos a callar, el tiempo se acabó”.
Por su parte, el periodista independiente Waldo Fernández, quien participó activamente en una de las protestas pacíficas del pasado año en la isla, ha relatado su experiencia y ha alertado de la falsa concepción que tiene la comunidad internacional de libertad que hay bajo el régimen cubano: “No se puede ejercer el periodismo libre en la Isla. Reporteros sin fronteras considera Cuba uno de los países más represivos del mundo”.
Asimismo, ha expuesto el miedo que para muchos cubanos supuso unirse a las manifestaciones. “Todos sabíamos a lo que nos enfrentábamos al salir a las calles. Tenía miedo, pero el grito de Patria Y Vida me hizo perder mi condición de periodista y volverme un ciudadano más”, ha continuado.
Finalmente, el catedrático de Derecho Constitucional José Manuel Vera ha querido lanzar un mensaje al Partido Comunista Cubano y al régimen castrista de Miguel Díaz-Canel para que rompan con su inmovilismo y se abran al diálogo para reconocer el pluralismo político en la isla y, así, ser capaces de crear una Asamblea constituyente y una Constitución, las primeras piedras hacia la transición democrática.
Soraya Rodríguez ha admitido sentirse emocionada tras escuchar los testimonios de los activistas y ha querido concluir el acto con un mensaje de esperanza a la comunidad cubana dentro y fuera de la isla y, especialmente, a los presos políticos que sufren ya un año de represión injusta por participar en el 11-J. “Cuba debe encontrar el camino necesario para la transición a la democracia, y este tiene que partir de que los presos políticos estén en libertad”, ha finalizado.